Llega el disco más obsceno de Rihanna

Más agresivo, arrebatador y sexual si cabe, así es el sexto de Rihanna. Dicen que muchas de estas canciones estaban pensadas para una versión deluxe de Loud y ciertamente, la artista afianza el camino emprendido en ese trabajo, pero el resultado es mucho mejor y la producción impecable. En Talk That Talk el pop, R&B y el hip hop dejan paso a otros coqueteos con estilos mucho más electro e incluso con el dancehall. Pero desde luego, lo que más sorprenderá a su legión de fans, serán las letras muy muy hot, Talk That Talk, pues eso. ¿Estará teniendo Rihanna una fase erótica a lo Madonna?

La carta de presentación, We found Love, encabeza los temas dance-pop de este trabajo. En cuya dirección también se encuentra Where Have You Been, (producida por Calvin Harris). Una canción de ritmo frenético, que combina las guitarras con los beats casi trance dando un resultado dance-electro muy sexy y que seguro hará del corte el tercer single.

Porque ya sabemos que el próximo single será You Da One. El ritmo R&B se difumina en este tema pop, con un estribillo pegadizo “My love is your love, your love is my love”. Dr Luke esconde su mano tras este medio tiempo al más puro estilo Rude Boy, canción a la que evoca Talk That Talk donde Jay-Z hace su aparición estelar. Rihanna coquetea con los ritmos caribeños en Watch N' Learn.

Temas complicados y difíciles de digerir -quizá por la producción, quizá por las letras- han sido Cockiness (Love It), el tema danceall y el más picantes de este disco, junto a Birthday Cake, en la que se abusa de los sintetidarores y la insípida, Roc Me Out.

Para disfrutar de la tesitura vocal hay que esperar a We All Want Love, un baladón al estilo Halo Beyoncé –sin llegar a serlo, ojo-, Drunk on Love y al cierre del disco con Farewell. Y es que personalmente, he de reconocer, prefiero a la Rihanna en modus deeper, aunque no es la tendencia musical que arrasa ahora.