
Según ha informado TMZ, Lovato le propinó un puñetazo a Alex Welch, quien salió del concierto con un ojo morado y parece que sus problemas emocionales y físicos han sido los culpables del inesperado arrebato de la artista.
Fuentes muy cercanas a la joven de 18 años aseguran que Demi se siente muy afectada por el suceso y no duda en responsabilizarse personalmente.
Esperemos que la sangre no llegue al río y que todo quede en un malentendido para la estrella de Disney que, por su parte, continúa inmersa en su próximo álbum que podría lanzarse en primavera de 2011. “El nuevo disco tendrá más R&B que Pop y será mucho más personal que los anteriores. Tiene un sonido diferente y ya espero impaciente los resultados”, confesó recientemente Demi.
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